Su importancia trasciende del mero hecho de ser un espacio para dar respuesta a nuestras necesidades más básicas y es que, el baño, no es una habitación menor. Como estancia indispensable dentro del hogar, su decoración requiere de una atención especial y es que debe ser inspirador y práctico a partes iguales. Tanto es así que la organización dentro del mismo resulta determinante y, por eso, mantenerlo siempre limpio y ordenado es la clave para conseguir un espacio atractivo y funcional. La cuestión se torna aún más importante cuando hablamos de espacios de reducidas dimensiones en los que, la ausencia del orden puede sumirnos en el caos más absoluto.
¿Harto de que tu baño siempre termine por parecer un campo de batalla? En este libro de ideas te damos todas las claves para acabar con este escenario tan poco alentador. Acompáñanos a conocer 12 consejos geniales para mantener tu baño limpio y ordenado siempre y ¡adiós al caos!
El aprovechamiento del espacio, máxime en baños pequeños, es fundamental y, en este sentido, nada como contar con una buena cajonera bajo el lavabo para añadir una práctica solución de almacenamiento a la decoración.
Las paredes son otro escenario perfecto que puedes utilizar como soporte para incorporar elementos con los que garantizar el orden y la limpieza del baño. Unos estantes colocados estratégicamente sobre el inodoro te permitirán aprovechar un espacio (que habitualmente se pierde) para colocar todo tipo de enseres.
Los rincones tienden a convertirse en puntos muertos de cualquier estancia. Sin embargo, puedes aprovecharlos para colocar un mueble esquinero que, además de servir para organizar toallas, jabones o útiles propios del baño, se integrará a la perfección en la decoración.
Mantener el baño limpio y ordenado no cuestión de añadir muebles o accesorios sino de gestionar de manera efectiva los recursos disponibles. Para sacar el máximo partido a tus cajones apuesta por incluir divisiones con las que garantizar que todo aquello que alberguen permanezca siempre en perfecto estado de revista.
No escatimes en accesorios para mantener el orden. Siempre desde una óptica funcional, incluye entre los útiles propios de la organización del baño, cajas o recipientes adaptados a los elementos que vayas a almacenar.
Si tu baño no es demasiado pequeño, incluir un armario dentro del mismo es una buena manera de dar respuesta a tus necesidades de almacenamiento. En este caso, su presencia resulta de lo más práctica para diseñar, dentro de la estancia, una pequeña zona de lavado que está perfectamente organizada.
Ya sea en diseños modernos, clásicos, minimalistas, rústicos o de cualquier otra tendencia, los cestos de mimbre y oros materiales, son una herramienta muy recomendable para la organización de las toallas.
Mantener el baño limpio y ordenado no es una tarea que esté reñida con apostar por elementos originales que ayuden a conseguirla. Estos estantes hexagonales son la prueba fehaciente de que puede alcanzarse el orden con mucho estilo.
Sobre todo en baños pequeños, apostar por muebles modulares permitirá una gestión inteligente del espacio. Con la ayuda de un profesional de la carpintería conseguirás mantener tu baño ordenado ofreciendo un aspecto acogedor y cálido.
Las estanterías son, sin ningún género de duda, grandes aliadas a la hora de tener el baño limpio y ordenado. Su versatilidad y variedad en materia de formas y materiales las convierte en un elemento apto para todo tipo de diseños de baños.
Cuando se trata de organizar las toallas, una alternativa a cajones, armarios o cestos, son los percheros y colgadores. Este sistema no supone un gran sacrificio de espacio y, sin embargo, te ayudará a mantenerlas ordenadas.