En este libro de ideas vamos a mostrarles diferentes variedades de baldosas para el patio y la terraza que no sólo resultan súper prácticas, sino que también se ven divinas en exteriores. Lamentablemente no es poco común que el patio o la terraza estén bien al final de la lista de proyectos que tenemos pendientes realizar en casa. No es de extrañar, ya que se trata de espacios exteriores, pero la verdad es que pasamos ratos tan agradables en ellos que es una lástima dejarlos en el olvido.
Los revestimientos son un aspecto vital de estos espacios y ninguno es más importante que el del piso. Azulejos, baldosas y lajas, cualesquiera que sean las opciones que barajamos, lo importante es que cumplan con los requerimientos funcionales que necesitamos en exteriores, sin perder de foco que la elección debe obedecer a la estética también.
La elección de piso ideal puede ayudarnos a darle a nuestros exteriores ese estilo que más nos gusta. Si por ejemplo soñamos con un patio bien rústico, un porcelanato brillante en color blanco resultará tan determinante que echará por tierra todos nuestros planes.
Lo cierto es que hoy en día el mercado nos ofrece opciones casi ilimitadas cuando se trata de variedades de baldosas, elaboradas en diferentes materiales, con todos los motivos y colores que podamos imaginar. El rango de precios también varía muchísimo, acabando con las excusas mentales para seguir ignorando la necesidad de darles al patio y a la terraza el piso que se merecen.
Hace unos años empezamos a ver porcelanatos que imitan madera. La fiebre se apoderó de interiores y exteriores por igual y se han vuelto una ocurrencia bastante común en casas alrededor el mundo. Si bien nada puede igualar las cualidades únicas de la madera, estas baldosas tienen muchas ventajas por mérito propio: son resistentes a la humedad, las plagas y los microorganismos como hongos o moho. Una vez instalado, este piso requiere de poquísimo mantenimiento, es lavable y disimula el polvo, la arena y la tierra, lo cual lo hace inmejorable para exteriores.
Para terrazas de cualquier estilo, los cerámicos calcáreos artesanales son una maravillosa opción. Son una fuente de alegría y color, le dan diferentes texturas al piso y nos permiten darle a nuestros exteriores un aire morisco o mediterráneo muy atractivo. Esta variedad de baldosas se fabrican con polvos de mármol y otras piedras, para obtener esa cualidad similar a la tiza tan linda.
Las baldosas de barro también llamadas terracota, tienen una cualidad artesanal muy atractiva. En colores cálidos y variantes, ya que depende del tipo de barro con el que se elaboraron, tienen un acabado rústico que las hace muy atractivas. Son resistentes al calor y vienen en diferentes formas y tamaños.
El porcelanato es una de las variedades de baldosas más resistentes que hay. Funciona de maravillas para exteriores expuestos a altas temperaturas y en sus acabados más lisos y brillantes resulta ideal en casas o departamentos de estilos modernos o minimalistas.
Los cerámicos calcáreos unicolores presentan algunas posibilidades decorativas interesantísimas. En este pequeño patio se hicieron filas de diferentes colores creando un efecto cromático muy interesante que hace un juego con las paredes de hormigón perforadas.
Las baldosas de hormigón son una opción excelente para exteriores, ya que son muy resistentes y no suelen presentar los problemas de quebraduras que pueden ocurrir cuando se trata de pisos de hormigón vaciado. Estas baldosas envejecen muy bien y no hacen más que ganar con la exposición a los elementos.
En la Argentina hay aún vestigios de una época dorada en la que se hacían traer toda clase de productos de Europa para la construcción de casas. Este piso antiguo de mosaico calcáreo fue restaurado y enmarcado en cemento, para devolverle a este patio su esplendor original.
Estas baldosas que simulan un deck de madera fueron dispuestas en esta terraza de manera alternada, creando un efecto interesantísimo. Más que tratar de imitar un piso de madera, la ocurrencia resultó en una especie de mosaico muy original y diferente.
Son de los más comunes ya que a pesar de sus muchas virtudes, están del lado de los pisos más baratos. Vienen en cantidad de presentaciones y colores. En sus versiones más ásperas son un buen piso anti resbalante.